Si eres un apasionado de las letras y estás al día de las redes sociales y en general de los eventos literarios, probablemente sabrás que cada año durante el mes de noviembre se celebra el NaNoWriMo. Si te suena haber visto este término por algún sitio pero no tienes ni idea de lo que significa te recomendamos visitar la entrada que hicimos el año pasado.
Este año hemos querido aportar un granito de arena a todos aquello que estáis participando porqué externamente vemos lo difícil que resulta llegar a la meta. Por ello hemos pedido consejos a autores conocidos, algunos más jóvenes que otros, pero con novelas de éxito de su puño y letra en su mochila.
Gema Bonnín (Arena Roja, Legado de Reyes…)
- Convierte tu entorno en un aliado: Según mi experiencia, el desorden no ayuda nada a la eficiencia. Adecentar el escritorio o hacer la cama son detalles aparentemente nimios pero que ayudan a la concentración e invitan al trabajo. Aunque si eres una persona que se siente cómoda en el caos y encuentra en él un equilibrio propio, este punto quizá sea prescindible.
- Evita las distracciones: Poner el móvil en modo avión o desconectar el internet para eludir notificaciones molestas y no urgentes siempre ayuda a tener un buen ritmo de trabajo. Y si por ejemplo estás leyendo un libro muy interesante cuya trama te tiene en un sin vivir, quizá sea conveniente apartarlo de tu campo de visión mientras escribes.
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Fija tus metas: Dedica un par de minutos antes de la escritura a pensar exactamente qué es lo que quieres contar y cómo quieres hacerlo. Si se te ocurre una fórmula extraordinaria y tienes miedo de olvidarla cuando empieces a redactar, apúntala, hazte un pequeño esquema, no hay prisa, lo importante es empezar a escribir teniendo las cosas claras. Si te decantas más por la improvisación pura y dura, mi consejo es que pongas pasión en la redacción y te centres en la trama, no en la forma. No intentes hacerlo perfecto a la primera, solo disfruta del camino. Eso sí, tendrás el doble de trabajo en la corrección.
Wendy Davies (Recuerdos de un instante, Instant Karma,…)
- El NaNoWrimo va de perder el miedo, así que piérdelo. Escribe, pon una palabra detrás de otra, y deja de darle vueltas a la cabeza. Tan solo se trata de una lluvia de ideas gigante en la que plantarás las semillas de lo que algún día será tu novela.
- Para escribir no hace falta publicar, ni hacer bestsellers, ni tener lectores, para escribir lo único necesario es tener algo que decir. Así que dilo.
- 50.000 palabras en un mes parecen muchas, pero no lo son. A lo largo del día pronuncias una media de 14.000 palabras. ¡Deja de hablar y ponte a escribir!
- No seas literal. Vale, sí, el reto consiste en escribir 50.000 palabras en un mes, pero si no lo consigues no te preocupes. Tu vida no solo está hecha de noviembres. Tienes once meses más para escribir. Así que keep calm and write on.
Daniel Ojeda (Cómeme si te atreves,…)
- Escribe la historia que siempre has querido contar, tienes que estar muy seguro de ella.
- En el caso del Nano no revises hasta el final y cuando lo hagas, no pienses de forma negativa.
- Sigue escribiendo siempre, haya o no Nanowrimo.
Clara Cortés (Al final de la calle 118, Cosas que escribiste sobre el fuego…)
- Escribe todos los días, pero no te fuerces: no te obligues a escribir si te has atascado en una escena concreta, pero tampoco dejes de hacerlo completamente. Teclea algún diálogo suelto o alguna escena que hayas pensado que podría encajar más adelante, incluso aunque al final no la vayas a incluir.
- Desconecta e intenta dedicarle un rato todas las tardes a hacerlo: descárgate, por tu vida, el Forest: Stay Focused. O puedes no hacerlo, no sé; a mí esta app me viene muy bien para no distraerme con Twitter, WhatsApp, Facebook, etc (y todo por no matar al arbolito). En realidad, el caso es que estés centrado en eso un buen rato, pero puedes usar el método que quieras para no desconcentrarte.
- Alterna entre una agenda y un ordenador: no sé si seré muy rara, pero a mí me funciona cambiar de dispositivo cuando me atasco. A veces las cosas de mi agenda son horribles y al pasarlas al ordenador se despierta la chispa de la inspiración y me sale todo perfecto; otras, ver la página me agobia y parece que el teclado no me responde y, al coger el boli, todo fluye un poco. Supongo que depende del momento y de la persona, pero a lo mejor a ti también te puede funcionar (?).
- Que no sea escribir todo lo que hagas: lee. Lee cosas relevantes para lo que estás escribiendo, que te inspiren y te ayuden. Además, descansar también es importante.
Andrea Izquierdo (Otoño en Londres,…)
- Escribir un poco todos los días
- Comparar los avances con más participantes del nano
- Tener un espacio tranquilo donde escribir y trabajar en la historia
