PORTADA
MOTIVACIÓN A LA LECTURA
Hotel Lutecia me conquistó antes de leerlo por su portada, pero sobre todo por su sinopsis que da a entender que la novela se sitúa en la época de la Segunda Guerra Mundial, sobre la que me gusta leer y conocer y aprender lo que ocurrió en esos tiempos convulsos.
SINOPSIS
Abril de 1945. Andreu Ribera, liberado del campo de concentración de Dachau, solo tiene un propósito: llegar a París y conseguir noticias de Rosa, su mujer. Allí, en el hotel Lutecia, la Cruz Roja asiste a los deportados y organiza cuanta información llega a la capital: interminables relaciones de muertos, de desaparecidos y, las más esperadas, de supervivientes.
OPINIÓN PERSONAL
Si habéis leído la sinopsis oficial veréis que a esta le falta un trozo, esto es así porque considero que el fragmento que he omitido es un spoiler sobre Hotel Lutecia. La novela da comienzo cuando Andrés, nuestro protagonista es liberado del campo de concentración de Dachau al finalizar la Segunda Guerra Mundial, en el que fue encerrado por los Nazis. Sin ningún al que volver, porque España sigue con la dictadura de Franco, decide probar suerte en París. Marcha hacia el Hotel Lutecia, donde la mayoría busca a sus seres queridos en las interminables listas de fallecidos y desaparecidos. Él busca a Rosa su amor de juventud del que tuvo que separarse en Barcelona años atrás.
Seguidamente busca trabajo de camarero y la suerte le sonríe en un Bistrot (Bar francés), donde conoce a sus primeros amigos en Francia.
VALORACIÓN
Hotel Lutecia nos traslada a la ciudad de París de 1945 donde miles de personas buscaban a sus seres queridos con vida tras una guerra devastadora. Con Andrés, la autora pretende reflejar la situación de una gran parte de los presos en campos de concentración que fueron liberados con el fin de la guerra y no tenían lugar al que volver. El Hotel Lutecia de París alojó durante semanas a muchas de estas personas que fueron atendidas por voluntarios y que buscaban sin cesar a sus seres queridos.
Leyendo la novela me encontré en una curiosa situación, durante toda un día estuve muy triste sin saber el porqué, a la noche antes de dormir cuando retomé mi lectura averigüé el porqué. El personaje principal, Andrés, se pasa gran parte de la novela en un estado de tristeza absoluta. La autora, Empar Fernández, consigue con su prosa transmitir al lector los sentimientos plasmados durante el transcurso de la historia.
Empar Fernández tiene en Hotel Lutecia dos maneras de escribir: una más clásica, con narraciones más toscas de leer y otra más ligera, se podría considerar más fresca. Esta segunda manera de narrar la historia me ha parecido mucho mejor y más dinámica a la hora de avanzar. Otro tema a destacar son las descripciones, que en ocasiones son demasiado extensas, teniendo la sensación de no avanzar en la historia.
La «segunda parte de la novela» de la que se hace spoiler en la sinopsis, me parecido la más interesante de toda la historia por situarse en otra época mucho más cercana y menos explotada en la literatura. Sin embargo, a pesar de su desarrollo me hubiese gustado una mayor extensión de ésta, explicando con más detalle las vidas de ambos protagonistas.
Por último destacar la manera de tratar el amor a lo largo de la novela. La historia romántica que se desarrolla entre dos personajes de Hotel Lutecia (no diré nada más sobre estos para no hacer spoiler) no me ha parecido forzada sino que por la situación de ambos y la soledad finalmente estos se ven atraídos. Mientras leía esta parte de la novela estaba escuchando la canción Destino o Casualidad de Melendi y aunque la letra no tiene mucho que ver en este contexto el ritmo me ha parecido del todo acertado.
En conclusión Empar Fernández consigue con Hotel Lutecia narrar de una forma verídica y cargada de sentimientos, la época más dura de la historia de la humanidad. Con unos personajes atípicos consigue mantenernos con intriga casi hasta el final de la novela, con un secreto familiar ocurrido hace años en la Barcelona natal de Andrés Ribera.