Mi negro pasado es la esperada continuación de Como agua para chocolate

La conocida escritora mexicana Laura Esquivel ha vuelto a las librerías con una de las continuaciones más esperadas por su público lector. Mi negro pasado salió a la venta en España hace apenas unas semanas de la mano de Suma de Letras. Como agua para chocolate la novela más exitosa de la autora con diferencia, publicada en 1989 no tardó en alcanzar su expansión internacional siendo traducida a más de 64 idiomas, además cuenta con adaptación cinematográfica estrenada en 1992.

Han pasado casi 28 años desde la salida a la venta de Como agua para chocolate, pero Laura Esquivel ha vuelto a rememorar la historia de Pedro y Rosaura. Sin bien es cierto que en 2016 salía a la venta El diario de Tita, considerado la segunda parte de la saga Como agua para chocolate, pero este no era una continuación al uso sino que nos mostraba la historia ocurrida años antes de que ocurriese la historía de la gloriosa novela Como agua para chocolate a través de la voz de Tita De La Garza. 

En Mi negro pasado, Laura Esquivel a través de María la tataranieta de nuestros tan queridos protagonistas Pedro y Rosaura, defenderá valores como la libertad femenina, la lucha contra el consumismo o la obesidad.

María, adicta a la comida, sufre el injusto fin de su matrimonio, en mitad de una avalancha de reproches racistas y machistas. Deshecha, recibe de manos de Lucía, su abuela por mucho tiempo ausente, el diario de Tita. Al adentrarse en él, descubrirá insospechados secretos familiares, la capacidad del espíritu humano para volar alto gracias a la alquimia que transforma los ingredientes naturales en alimento y un sentido de pertenencia jamás experimentado.

La voz de María, de la misma estirpe guerrera que las mujeres De la Garza, continuará tejiendo la saga familiar. La protagonista deberá sortear los baches filiales, al tiempo que gana confianza en sí misma. Este proceso la llevará a crear una conexión inquebrantable con Tita y todos sus ancestros, y logrará así la reconciliación de cuerpo y mente. Un renacer a la vida. Pero el verdadero dilema será cuando María experimente otra vez el más profundo de los sentimientos: el amor.