No hay duda de que, si pudiéramos dar una vuelta al mundo en 80 días a lo Julio Verne, nos toparíamos con unas cuantas librerías curiosas que nos llamarían la atención: bien por su diseño espectacular y fuera de lo común, bien por su contenido. En esta ocasión, vamos a dedicar este post en parte a una localizada en Zhen Yuan, China: Yangzhou Zhongshuge. Fue contruida intentando imitar el concepto del recorrido de un río (que por cierto, fue la inspiración del artista, pues afirmaba que los poetas y otros intelectuales en épocas anteriores solían acudir allí) por el arquitecto Li Xiang y su equipo.
El proyecto en general de por sí ya es bastante innovador, pero lo que más destaca es la forma que adquiere la librería: unas especies de semicircunferencias. Además, se creó un puente para preservar la cultura de la ciudad que da directamente a la puerta principal, tras la cual se esconde el vestíbulo que da paso a un concepto simétrico de colocación de los libros: estantes de miles de libros curvados hacia el techo. Cuenta con más de 1000 metros de extensión y no olvida incluir una zona para que los más pequeños también puedan disfrutar de la lectura.
Aunque es muy parecida, no debe confundir con la Zhongsuhge Hangzhou. Esta segunda alude más al concepto «espejo», pues está llena por todos los lados de estanterías que envuelven al cliente y que le sumerjen por completo en el mundo de los libros. Sin embargo, a esta se le añade un elemento muy futurista: la forma que tiene se asemeja a un ovoide, haciendo recordar las naves espaciales en las que todos hemos soñado alguna vez estar. Su arquitecto es el mismo, Li Xiang, y el tamaño es parecido al de la librería Yangzhou Zhongshuge: sin embargo, esta está dentro de un importante comercial en Hangzhou, Zhejiang.
¡Es impresionante la diversidad de librerías que encontramos en función de los países y su cultura! No os olvidéis pasaros por ellas si tenéis la oportunidad, porque realmente deben merecer la pena.